Los Beneficios del consumo de lácteos presentan múltiples investigaciones que fomentan su consumo por los efectos en la microbiota intestinal.
El cáncer muestra estadísticas alarmantes en todo el mundo como, por ejemplo, una de cada ocho muertes es a causa del cáncer. La incidencia de cáncer prácticamente se ha duplicado en los últimos 30 años, y en 10 años más se podría triplicar. Según el Globocan 2020 el cáncer colorrectal (CCR) ocupa el tercer lugar en tipo de cáncer diagnosticado más frecuente a nivel global y se encuentra como segunda causa principal de muerte por cáncer.
De acuerdo al tercer informe de expertos publicado el Instituto Americano para la Investigación del Cáncer (AICR) y el Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer (WCRF) en el 2018, informan que se encuentra niveles altos de evidencia donde se relaciona el consumo de productos lácteos y el calcio con un menor incidencia de CCR.
¿Qué es el cáncer colorrectal?
El cáncer colorrectal es un tipo de patología gastrointestinal que comienza en el colon o en el recto. El adenocarcinoma es la neoplasia maligna colorrectal más frecuente, desafortunadamente, el cáncer colorrectal puede permanecer silencioso durante mucho tiempo, al menos hasta que crece y se propaga sustancialmente, lo que afecta negativamente el pronóstico.
En pacientes sintomáticos, o en estadios avanzados se puede generar cambios en la motilidad intestinal (Diarrea o estreñimiento), sensación constante de necesidad de evacuar, sangrado colorrectal oculto o evidente, así como malestar abdominal, calambres, pérdida de peso inexplicable, debilidad y fatiga.
Las últimas investigaciones científicas presentadas por la Universidad de Norbert Wiener en Lima Peru, consideran que entre un 30% y 40% de la prevalencia del cáncer podrían ser prevenibles con diversos factores de prevención , como son la dieta,el control del peso corporal y el incremento de la actividad física.
El consumo de diversas sustancias naturales y sintéticas para la prevención del cáncer es un tema polémico. Algunos autores afirman que hasta el 70% de todos los cánceres están relacionados con la dieta e incluso el 90% del CCR puede prevenirse mediante modificaciones dietéticas.
El calcio de los Lacteos
Si bien la ingesta de lácteos se ha asociado, de forma negativa, positiva y neutra en relación con diferentes tipos de cáncer, debido a los diversos compuestos bioactivos como por ejemplo el calcio. Un mayor consumo de lácteos en general, tiene una relación con un 24% menos riesgo de incidencia de CCR. Esto se debería a que el calcio de los lácteos tiene como una de sus funciones unirse a los ácidos biliares secundarios y también a los ácidos grasos, inhibiendo sus efectos carcinogénicos sobre el epitelio colorrectal, además induce la apoptosis de células cancerosas.
Los lácteos son alimentos de alto valor nutritivo, diversas investigaciones han identificado a los lácteos como alimentos que son fuente de diversos nutrientes como el calcio, la vitamina B2, la vitamina B6, la vitamina B12, la vitamina A, la niacina, el ácido pantoténico, la biotina, el fósforo, el magnesio, el zinc, el selenio, el potasio, el yodo y las proteínas. Por este motivo, cubrir la ingesta recomendada de los nutrientes anteriormente expuestos, es más complejo en una dieta sin lácteos debido a alergias, rechazo, o encontrarse bajo regímenes veganos (9).
Más aún, los lácteos fermentados presentan mayor antioxidante que los lácteos que no se encuentran fermentados, por ello existen múltiples investigaciones que fomentan su consumo por los efectos benéficos que brindan en la microbiota intestinal.
También es importante
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señalar el consumo de lácteos genera sinergia que permite potenciar su perfil nutricional, debido a que la lactoferrina aumenta la absorción de hierro; del mismo modo la caseína y la lactosa incrementan la absorción del calcio, incluso el consumo de lácteos fermentados, por la disminución del pH y la hidrólisis generada en su producción, permiten la solubilización de minerales como el calcio, el fósforo y el magnesio permitiendo la formación de sales solubles de hierro, cobre y zinc , así como de complejos péptidos con minerales que permiten una absorción más fácil.
lácteos fermentados contienen
abundantes probióticos como Lactobacilos y Bifidobacterium. La microbiota del cuerpo humano puede formar un microambiente para alterar la susceptibilidad y la progresión del cáncer. En un estudio de casos y controles, se encontró que la microbiota asociada al CCR cambiaba con el grado de malignidad a lo largo de la secuencia adenoma-carcinoma.
Se ha demostrado que el calcio reduce el riesgo de neoplasias colorrectales a través de una variedad de mecanismos, incluida la unión a ácidos grasos y biliares de cadena larga y la protección de las células epiteliales grandes de sus efectos proliferativos y mutativos. La activación de los receptores sensores de calcio es una de las vías principales que utiliza el calcio extracelular para la quimioprevención que conduce a un mayor nivel de calcio intracelular, limitación del crecimiento tumoral, promoción de la diferenciación celular y apoptosis.
No se podría asegurar que exista sólo un alimento o nutriente en particular que evite desarrollar CCR o se considere un tratamiento efectivo, en realidad la prevención relacionada con la alimentación se basa en una dieta diaria equilibrada , el consumo de lácteos, la ingesta adecuada de fibra , así como de probióticos, vitaminas y minerales para que en sinergia generen efectos positivos en el organismo.
Beneficios del consumo de lácteos en la reducción del riesgo del cáncer colorrectal
El cáncer muestra estadísticas alarmantes en todo el mundo como, por ejemplo, una de cada ocho muertes es a causa del cáncer. La incidencia de cáncer prácticamente se ha duplicado en los últimos 30 años, y en 10 años más se podría triplicar. Según el Globocan 2020 el cáncer colorrectal (CCR) ocupa el tercer lugar en tipo de cáncer diagnosticado más frecuente a nivel global y se encuentra como segunda causa principal de muerte por cáncer.
De acuerdo al tercer informe de expertos publicado el Instituto Americano para la Investigación del Cáncer (AICR) y el Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer (WCRF) en el 2018, informan que se encuentra niveles altos de evidencia donde se relaciona el consumo de productos lácteos y el calcio con un menor incidencia de CCR.
¿que es el cáncer colorrectal?
El cáncer colorrectal es un tipo de patología gastrointestinal que comienza en el colon o en el recto. El adenocarcinoma es la neoplasia maligna colorrectal más frecuente, desafortunadamente, el cáncer colorrectal puede permanecer silencioso durante mucho tiempo, al menos hasta que crece y se propaga sustancialmente, lo que afecta negativamente el pronóstico. En pacientes sintomáticos, o en estadios avanzados se puede generar cambios en la motilidad intestinal (Diarrea o estreñimiento), sensación constante de necesidad de evacuar, sangrado colorrectal oculto o evidente, así como malestar abdominal, calambres, pérdida de peso inexplicable, debilidad y fatiga (3).
Los últimas investigaciones científicas consideran que entre un 30% y 40% de la prevalencia del cáncer podrían ser prevenibles con diversos factores de prevención , como son la dieta,el control del peso corporal y el incremento de la actividad física (5). El consumo de diversas sustancias naturales y sintéticas para la prevención del cáncer es un tema polémico. Algunos autores afirman que hasta el 70% de todos los cánceres están relacionados con la dieta e incluso el 90% del CCR puede prevenirse mediante modificaciones dietéticas.
Beneficios del consumo de lácteos y el calcio
Si bien la ingesta de lácteos se ha asociado, de forma negativa, positiva y neutra, en relación con diferentes tipos de cáncer, debido a los diversos compuestos bioactivos como por ejemplo el calcio. Un mayor consumo de lácteos en general, tiene una relación con un 24% menos riesgo de incidencia de CCR.
Esto se debería a que el calcio de los lácteos tiene como una de sus funciones unirse a los ácidos biliares secundarios y también a los ácidos grasos, inhibiendo sus efectos carcinogénicos sobre el epitelio colorrectal, además induce la apoptosis de células cancerosas.
Los lácteos son alimentos de alto valor nutritivo, diversas investigaciones han identificado a los lácteos como alimentos que son fuente de diversos nutrientes como el calcio, la vitamina B2, la vitamina B6, la vitamina B12, la vitamina A, la niacina, el ácido pantoténico, la biotina, el fósforo, el magnesio, el zinc, el selenio, el potasio, el yodo y las proteínas. Por este motivo, cubrir la ingesta recomendada de los nutrientes anteriormente expuestos, es más complejo en una dieta sin lácteos debido a alergias, rechazo, o encontrarse bajo regímenes veganos .
Los Beneficios de los lácteos fermentados
Los lácteos fermentados presentan mayor antioxidante que los lácteos que no se encuentran fermentados, por ello existen múltiples investigaciones que fomentan su consumo por los efectos benéficos que brindan en la microbiota intestinal.
También es importante señalar el consumo de lácteos genera sinergia que permite potenciar su perfil nutricional, debido a que la lactoferrina aumenta la absorción de hierro; del mismo modo la caseína y la lactosa incrementan la absorción del calcio, incluso el consumo de lácteos fermentados, por la disminución del pH y la hidrólisis generada en su producción, permiten la solubilización de minerales como el calcio, el fósforo y el magnesio permitiendo la formación de sales solubles de hierro, cobre y zinc, así como de complejos péptidos con minerales que permiten una absorción más fácil.
Lácteos fermentados contienen abundantes probióticos como Lactobacilos y Bifidobacterium. La microbiota del cuerpo humano puede formar un microambiente para alterar la susceptibilidad y la progresión del cáncer. En un estudio de casos y controles, se encontró que la microbiota asociada al CCR cambiaba con el grado de malignidad a lo largo de la secuencia adenoma-carcinoma.
Se ha demostrado que el calcio reduce el riesgo de neoplasias colorrectales a través de una variedad de mecanismos, incluida la unión a ácidos grasos y biliares de cadena larga y la protección de las células epiteliales grandes de sus efectos proliferativos y mutativos.
La activación de los receptores sensores de calcio es una de las vías principales que utiliza el calcio extracelular para la quimioprevención que conduce a un mayor nivel de calcio intracelular, limitación del crecimiento tumoral, promoción de la diferenciación celular y apoptosis.
No se podría asegurar que exista solo un alimento o nutriente en particular que evite desarrollar CCR o se considere un tratamiento efectivo, en realidad la prevención relacionada con la alimentación se basa en una dieta diaria equilibrada , el consumo de lácteos, la ingesta adecuada de fibra , así como de probióticos, vitaminas y minerales para que en sinergia generen efectos positivos en el organismo.
Los productos lácteos fermentados, específicamente el yogur y el queso, se sociaron significativamente con un menor riesgo de precursores convencionales y aserrados de cáncer colorrectal.